Servicio de entrega inmediata
Mucho han cambiado las cosas desde que las compras online empezaron a ser algo habitual entre los usuarios del e-commerce. Los primeros que comenzaron a hacer pedidos por Internet se enfrentaban a incertidumbres como la seguridad en los pagos, la introducción de sus datos y, sobre todo, al tiempo de espera de recepción de su paquete que, en la mayoría de las ocasiones, se traducía en semanas, incluso meses de duración, ni mucho menos en una impensable entrega inmediata.
Ahora que la compra online es un habitual en nuestra vida, recibir el pedido en el menor tiempo posible se antoja, más que una opción, casi una necesidad que la mayoría de los comercios se esfuerzan en ofrecer entre sus servicios disponibles, tanto que es muy difícil encontrar algún web site que no incluya la entrega inmediata.
De esta manera, no solo se garantiza una mayor eficiencia y calidad del servicio, sino también un plus de satisfacción y un extra que invita al usuario a repetir y recomendar la compra. Esta se convierte en una experiencia plena que cumple con la necesidad de inmediatez y agilidad demandada a la hora de realizar el proceso de compra de un producto online.
La entrega inmediata: qué es y cómo funciona
Al plantearnos qué es la entrega inmediata, basta con analizar la naturaleza de su celeridad: la entrega inmediata es un servicio de mensajería urgente que consiste en la entrega del pedido o paquete en un tiempo que no supera las dos horas. Es de carácter breve, se realiza en mano y permite al cliente disponer de su compra apenas horas después de haberla realizado.
El funcionamiento es simple, pero no por ello está menos planificado ni logísticamente diseñado: todo lo contrario, tras la entrega urgente, hay todo un mecanismo igual de práctico como efectivo, en el que entran en juego la orden de compra del cliente, la recepción de la tienda virtual y el mensajero (que puede pertenecer incluso a una empresa tercera) que entregue efectivamente el producto al cliente en el tiempo estipulado.
La entrega inmediata es ofertada en multitud de productos, es decir, los paquetes no tienen una medida estándar ni están limitados a una cantidad concreta. Por eso, dependiendo de su tamaño, las entregas inmediatas pueden realizarse en transportes ligeros (motos e incluso bicicletas) o en furgonetas.
Tipos de servicios de entrega inmediata
Hay varias formas de clasificar los tipos de entrega inmediata, aunque no hay una lista cerrada. Estos tipos obedecen a clarificar al cliente las distintas opciones que puede tener y que se establecen según el tiempo de espera para recibir el paquete o, por ejemplo, de manos de quién lo recibirá (el tipo de transportista). Veamos algunos de estos tipos:
- Entrega inmediata clásica: en dos horas. Es la modalidad más utilizada y la más rápida, sobre todo porque obedece a la propia naturaleza del objeto que tiene que ser repartido, que normalmente es comida o productos relacionados con el sector de la gastronomía. También es muy demandado en servicios de envío de flores, medicamentos o regalos y sorpresas de cumpleaños que requieren de celeridad, sea por la propia fecha o sea por las propias características organolépticas del objeto a entregar (que sean perecederos).
- Entrega inmediata en el mismo día. Normalmente, suele obedecer a alguna oferta lanzada por la empresa o tienda online, como la de realizar el pedido antes de una hora determinada o en la franja indicada (y que obedecerá a estrategias de marketing internas). El beneficio es mutuo: la empresa obtiene rentabilidad de su oferta y un mayor número de ventas, al mismo tiempo que el cliente se beneficia del acceso a su compra de una manera mucho más rápida.
- Entregas en 24 horas. Actualmente, es uno de los más solicitados por los usuarios, pues se sitúa en un perfecto término medio entre los largos plazos de espera y la casi instantaneidad del primer tipo visto. Ofrecen mucha garantía y son la mejor solución para compras de última hora o para objetos que necesitamos usar y del que podremos disfrutar al día siguiente.
- Entregas por B2B o instant delivery. Realmente, es un tipo de estrategia comercial, dentro de las entregas inmediatas, por las que una empresa tercera ofrece sus servicios de gestión y reparto a otro comercio, sirviendo como una pasarela entre el usuario y el e-commerce. Por ejemplo, seguro que te suenan Just Eat, Glovo o UberEat. Estas son empresas que hacen que muchos restaurantes y negocios puedan enviarte cualquier cosa de forma inmediata, incluso en un tiempo de entrega de menos de 60 minutos en áreas urbanas. A nivel internacional, son muy exitosos los servicios que ofrece Deliv, en EE. UU. o Stuart en Europa, que conecta a miles de e-commerce con los usuarios finales.
A la hora de elegir nuestro tipo de entrega inmediata, debemos tener en cuenta una serie de factores y, sobre todo, ponernos en contacto con el servicio de información al cliente de la empresa o el e-commerce en caso de que tengamos alguna duda. En todo caso, recuerda que:
- A veces, la tienda donde compras no es una gran superficie como El Corte Inglés, Amazon, Media Markt o Zalando, sino una tienda local o una pequeña startup que cuenta con servicio online. En estos casos, la zona geográfica donde vivas influirá a la hora de ofrecerte el servicio de entrega inmediata. No dudes en consultarlo: hay comercios que sí pueden ofrecer servicios a localidades más lejanas, pero a otros les puede resultar imposible abarcar barrios, distritos o ciudades que se alejen demasiado de su zona geográfica.
- Puede ser que se solicite una pequeña cantidad añadida por el servicio.
¿Es la entrega inmediata el servicio adecuado para mí?
Si por algo la entrega inmediata es un servicio que está al alza y que cada vez más tiendas adaptan entre su oferta, es porque obedece a la necesidad de cumplir con una expectativa que, desde la implantación de la compra online, demandan los clientes: el mundo actual es exigente en cuanto a rapidez, el valor del “ahora” y la compra para el momento. Y la urgencia de la rutina se refleja en el modo de consumir, para lo que este modelo es, cuanto menos, ideal tanto en prestaciones como en satisfacción final.
Las empresas han optado por ofrecer a los usuarios el servicio de entrega inmediata, pero, como consumidor, ¿realmente es el servicio de entrega inmediata el que te conviene?
Es evidente que disfrutar de tu pedido en apenas 2 horas o el mismo día es una ventaja indiscutible, pero quizá el objeto que hayas comprado no requiere tanta urgencia o no es perecedero, por lo que puedes esperar sin asumir costes extra. O quizá no hayas contemplado la posibilidad de que puedas estar ausente en el tiempo en el que vengan a entregarlo.
Salvo estas matizaciones que pueden darse en algún momento, lo cierto es que estudios como el de e-commerce de la IAB (Interactive Advertising Bureau) arrojan que la entrega inmediata es un servicio que ha evolucionado de forma considerablemente favorable: casi el 30 % de los consumidores españoles estamos dispuestos a pagar más por una entrega rápida. Ya no miramos solo lo que queremos comprar y dónde, sino el plazo en el que queremos recibirlo. Y, cuanto más breve, mucho mejor.
Así que, y como a nadie nos gusta esperar, el servicio de entrega inmediata parece ser la mejor opción para asegurarnos de que, además de una compra de calidad, transparente y avalada con las pasarelas de pago diseñadas actualmente en pro de un comercio libre de fraudes, podamos disfrutar de nuestros pedidos en casa en el menor tiempo posible garantizado.